Abelardo de Armas, nació en Madrid en 1930. Vivió los difíciles años de la postguerra, debiendo comenzar a trabajar a los catorce años para poder subsistir. A los veintiuno se encontró con Dios en unos Ejercicios espirituales, momento clave en su trayectoria vital. Desde entonces ha dedicado toda su vida a Dios y a los jóvenes en los Cruzados de Santa María, de los que ha sido su Director General durante treinta y siete años.
Uno de sus temas preferidos ha sido hablar de la Virgen. Así, en ejercicios y retiros, en charlas y conferencias, en las Vigilias de la Inmaculada, pero también en sus escritos, como ha sido en la colaboración que cada dos meses hacía en la sección “Agua viva” que tenía asignada en la revista de experiencias apostólicas Estar.
Durante treinta años atendió esa sección. De allí han brotado reflexiones sencillas, pero bellísimas, especialmente a propósito del mes de mayo o de la Inmaculada. En 2003 hubo de dejar de escribir por una enfermedad degenerativa que le ha llevado a cumplir con la vocación de dejarse hacer por Dios y de las manos vacías, que tanto le han identificado, y que plasma asimismo en sus escritos.
Esta recopilación de escritos sobre la Virgen María, tomada de intervenciones orales suyas o como fragmentos de otros escritos, da cuenta de su amor a María.